Joan Manuel Serrat
La
vida a veces parece una triste broma, y no sólo lo parece sino que muchas veces estamos convencidos de que lo es...Si tienes la suerte de vivir muchos años te irás dando
cuenta. Parecemos marionetas movidas por una mano invisible, u hojas agitadas por el viento. Somos vapuleados de una forma o de otra, de aquí nadie se va de
“rositas”...Lo tengo comprobado.
¿Ves aquel vecino o vecina que
a simple vista se ve tan feliz? Pues te equivocas. No lo es. ¿Tiene
motivos? ¡¡Sí!! ¿Cuáles? Los suyos...
No,
no es ninguna bobada lo que estoy diciendo. Si piensas un poco te
darás cuenta de que nunca estamos satisfechos. La satisfación es
algo muy subjetibo, cada cual la siente en momentos y por cosas muy
distintas. Pero el verdadero problema del ser humano estriba, en que
para valorar lo bueno tenemos que vivir lo malo... Por expresarlo de
alguna manera.
Por
ejemplo: Una pareja. La vida en pareja ya no es estar en casa de los
papás. Entonces vamos agobiados, después del trabajo siempre hay
cosas que hacer y nos sentimos cansados y a veces nos quejamos un
poquito sólo, de momento. Luego viene el primer hijo...¡Dios! Esta
criatura ha puesto la casa patas arriba. La vida ha cambiado
completamente ahora somos tres y un hijo requiere mucha atención y
muchos cuidados. Trabajo, casa, un hijo....Uf! Al final de la semana
acabamos agotados y no podemos dejar de pensar , adorando a nuestro
hijo... porque lo adoramos, que antes de aumentar la familia éramos
libres como los pájaros y no sabemos por qué demonios en algún
momento nos habíamos quejado de cansancio o de falta de tiempo.
Ahora sí que estamos ocupados y faltos de tiempo. ¡¡¡Una criatura
necesita muchos cuidados!!! Y si nos sale respondona...
Pasa
un tiempo y dcidimos que no nos vamos a quedar con uno sólo, así
que a pesar de que no nos sobra ni el tiempo ni el dinero. Decidimos
ir a buscar la parejita. Y la parejita viene. Y...ahí... ¡¡¡se armó el
belén!!! Madre mía ¿Cómo lo hacemos ahora? Esto ya se complica
mucho. No damos a basto la faena se acumula, ropa, comida, trabajo,
guarderías, canguros...Llegamos al fin de semana hechos cisco.
Entonces o salimos o hacemos las mil cosas que tenemos pendientes de
toda la semana.
Decidimos que salimos con los niños, Hay que
dedicarles el tiempo que no hemos podido dedicarles durante la
semana, además lo estamos deseando. Y así un día y otro. Y... en
algún momento nos pasa por la cabeza, pensar que, ¿ cómo se nos
pasaba por el pensamiento, que íbamos agobiados de trabajo, cuando
no teníamos mas que una criatura? Si una criatura, la casa y el
trabajo se lleva “con la gorra”...¡¡Ahora sí!! Ahora con dos, las cosas se han complicado un poquito, pero ya crecerán, ¿no?
Y
si viene un tercero, ¡¡ya ni te cuento!! Faltan manos hasta para ir por
la calle. Tenemos dos manos. ¿Dónde me pongo el tercero? Pues donde
puedas...¡¡¡Tú te lo has buscado!!!...
Y
ENTONCES ES CUANDO TE DAS CUENTA QUE DOS CRIATURAS:
“SE
LLEVAN CON LA GORRA” Pero tres...
Y
así sucesivamente. No sé si el ejemplo ha sido clarficador, a mí
me ha servido para no quejarme de nada. Porque seguramente estoy en
el punto que cualquier otra cosa sería peor.
Bueno
cómo habréis captado todo es un poco, bastante irónico.
Valoremos
lo que tenemos; siempre puede ser mejor, pero también peor. Regla básica para ser feliz.
FIN.
MONTSE. G.
MONTSE. G.
...y tan sencilla para otros!
ResponderEliminarMe gusta lo que dices y como lo expresas, pero no es así para todos porque algunos tienen que derribar muros y otros ya tienen el camino hecho.
Que es ser afortunado? Y quien no lo es? dices que todo esto es un poco o bastante irónico. No! Es una realidad increíble haciéndolo como lo hacemos
Quien pudiera controlar su propia mente, y no dejar que nadie nos manipule...creo que este debería de ser el objetivo final y más importante del ser humano. Lo único que hay que hacer, es plantearse objetivos que verdaderamente te harán feliz o al menos te acercaran un poco más hacia esa felicidad. En el último post que puse, al final hablaba de una joven que murió hace años. Tenía una filosofía de la vida verdaderamente envidiable.
Una abraçada, Montse.
Josep es todo bastante irónico, pero así lo pienso de verdad, la ironía suele estar cargada de razón la mayoría de las veces. Lo que pasa es que mientras escribía esto, también pensaba en la gente más desfavorecida y que la vida no le ha dado opción ni tan siquiera de construir una vida "normalizada" como la que pinto aquí. Quizás alguien me leerá y pensará que...qué fácil lo cuento y que ojalá ellos pudieran tener lo que tiene la familia que yo describo.
EliminarPero es precisamente por eso que lo cuento, porque el ejemplo se puede trasladar a cualquier ámbito, en circunstancias mejores o peores. Yo deseo que todo el mundo pueda experimentar lo que cuento. Esto sería señal de una vida con las necesidades más básicas cubiertas.
Muchas gracias por tu comentario, Josep.
Una abraçada.