Esta frase, dio lugar a una especie de historieta que hoy quiero compartir, con quien quiera leer.
El cuento dice así:
Los sombreros parecen muy serios, precisamente por eso, porque están llenos de pensamientos y de
sabiduría. La gente dejó de llevarlos porque los que mandan y saben
de estas cosas dijeron a la población que al llevar sombrero, los
pensamientos se quedaban atrapados y aquello acababa por colapsarse y
el mal se adentraba en sus cabezas.
Como a las personas les gusta ir a la
moda, aquellos que siempre mandan en estas cosas, fueron los que
decidieron transmitir a la población a través de mucha propaganda
que, llevar sombrero era algo que incomodaba y que era mucho más
práctico no llevarlo. A partir de entonces, las gentes, empezaron a
dejar de llevar sombrero sin pensar en nada más que en estar a la
moda y de paso se ahorraban unos dinerillos, puesto que los sombreros
eran bastante caros.
Detrás de todo esto, había una malsana
intención, ya que, los que mandan en estas cosas lo único que
perseguían era que la población pensara lo menos posible, para así, hacerse con el poder absoluto de aquel país, y seguir adelante con
extender esta costumbre al resto de la población mundial. Ellos, no
se lo quitaron nunca., aunque aparecían en público sin él, para no
dar qué pensar a los pobres ciudadanos a los que se estaba
engañando.
Pasaron muchos, muchos años... Hasta que
uno de aquellos provincianos, empezó a darse cuenta de que al no
llevar el sombrero, las ideas se le escapaban con mucha facilidad, lo
que facilitaba que, aquellos que mandan en todas estas cosas,
acabaran por imponerles una forma de vida que cada vez era más y más
degradante.
Eran el poder, habían logrado que las
mentes no pensaran, o pensaran lo que ellos —cabezas pensantes con
sombrero— les convenía.
A partir de este descubrimiento, los
ciudadanos intentaron recuperar de nuevo los sombreros pero se
encontraron que ya no se fabricaban en ninguna parte. Al menos no, en
los sitios a los que ellos podían acceder.
Siguieron pensando y pensando. Se
estrujaban el cerebro para encontrar la manera de recuperar los
sombreros perdidos...Pero sus cerebros, dejaban que las ideas se
escaparan y no eran capaces de encontrar una salida a aquella
situación tan degradante.
Finalmente y al cabo de muchos, muchos
años más, alguien encontró un sombrero viejo y gastado: Había
sido arrastrado por un gran vendaval que azotó el mundo...Pero ya no
era capaz de acordarse para qué servía el sombrero.
Ya, habían sido dominados completamente
por aquellos que saben y mandan en estas cosas...
Montse
TEXTO PROTEGIDO POR UNA LICENCIA: Safe Creative.
Cuanta razón y sabiduria deja escapar este cuento, Montse. Seguramente los humanos ya hemos llegado tarde para entender lo importante que es llevar sombrero para no dejar escapar ninguna idea. Los que saben de estas cosas (de impedir que lo llevemos) incluso se lo querian quitar a las mujeres y hombres que con ellos hacen malabares. Además de un juego que a los niños les gusta mucho; sirve para cambiar ideas de un sombrero a otro. ¡Bah! Tonterías de seres humanos nos seguirà diciendo el hombre/poder, y nosotros no seremos capaces de inventar nuevos sombreros. Que pena! Si supieramos que con un sombrero regalan un colegio, o un libro si el sombrero es pequeño quizás entonces nos lo pensariamos más.
ResponderEliminarUna abraçada.
Hola Josep. Pienso que este cuento salió sin querer. Conscientemente no pensaba lo que iba a salir cuando empecé. Conforme escribía aquello empezó a tomar forma y finalmente concluyó en este quejido temeroso de que los hombres y mujeres del mundo dejemos de luchar por un mundo mejor y esto pasa por la responsabilidad que tenemos respecto a nuestro hermano o vecino y respecto a ser honrados para poder exigir honradez y buen hacer a " los que nos representan y saben de estas cosas ".
ResponderEliminarEl sombrero que llevamos todos, está dentro, pero se ve enseguida el modelo que llevamos... No nos dejemos quitar los sombreros...
Muchas gracias, Josep.
Una abraçada.
excelente punto de vista por ambas partes
ResponderEliminarGracias por leer anónimo!
EliminarTe importa si lo utilizo en un trabajo de lectura? Obviamente respetando que tu eres la escritora. Responde en cuanto puedas. Por cierto, lindo trabajo hiciste!
ResponderEliminarsaludos
Miguel angel.
Hola, Miguel Ángel. Bueno, pues...la verdad me halaga que quieras utilizarlo para un trabajo de lectura. Pero me encantaría saber, quién eres, qué trabajo es y para quién. Siempre que respetes y des a conocer mi nombre, lo puedes utilizar. Espero que me des alguna información más. Vale? Gracias!
EliminarSaludos.
Montse.
Me gusta tu escrito i sí efectivamente creo que cuando los hombres usaron un sombrero eran más inteligentes i educandos
ResponderEliminarGracias, Florentina por tu comentario a mi texto. Y es cierto; todo cuento encierra una gran verdad.
EliminarSaludos! :-)
No le entendí muy bien a tu cuento, ¿Que es lo que quieres dar a entender a los lectores?, disculpa pero de verdad no me es claro el concepto de este cuento, te agradecería mucho si me lo pudieses explicar.
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