Hoy recibí un regalo, un precioso regalo...Un poema.
Cada vez valoro más los regalos "no materiales". ¿Cuál debe ser el antónimo de materialista?
¿Idealista, soñador, romántico? No sé cómo definir un regalo "no material". Pero digamos que es algo... que te acaricia el alma. Te hace sentir sosiego, te aproxima a la armonía y a la conciliación con tu yo más íntimo.
Igual soy una exagerada...Qué se le va a hacer. Son momentos en los que unas letras escritas y una música, te hacen volar a las montañas más altas, y desde allí, al mirar hacia abajo sentirte en el cielo; viendo bajo tus pies la gran alfombra de nubes algodonosas.
Regalo que llegó de la mano de Joan Manuel Serrat.
Dónde
quiera que estés
te
gustará saber
que por
flaca que fuese la vereda
no
malvendí tu pañuelo de seda
por un
trozo de pan
y que
jamás,
por más
cansado que
estuviese,
abandoné
tu
recuerdo a la orilla del camino
y por
fría que fuera mi noche triste,
no eché
al fuego ni uno solo
de los
besos que me diste.
Por ti,
por ti
brilló mi sol un día
y
cuando pienso en ti brilla de nuevo
sin que
lo empañe la melancolía
de los
fugaces amores eternos.
Dondequiera
que estés
te
gustará saber
que te
pude olvidar y no he querido,
y por
fría que sea mi noche triste
no echo
al fuego ni uno solo
de los
besos que me diste.
Dondequiera
que estés...
si te
acuerdas de mí.